El Kétchup tiene su lugar en una gran cantidad de platos y se ha convertido en un alimento icónico en la actualidad. Por este motivo, en la entrada de hoy os vamos a mostrar 5 curiosidades que posiblemente no sepas sobre esta popular salsa.

1. El Kétchup no es americano

Aunque mucha gente lo da por hecho la realidad es que el Kétchup no tiene su origen en Estados Unidos sino en China, donde era conocido como Ketsiap, que significa salsa de pescado en escabeche. El Ketsiap era una salsa muy picante y especiada que se utilizaba para acompañar todo tipo de carnes y pescados. Y no, entre sus ingredientes no se encontraba el tomate.

2. Empezó a venderse como medicina

Los primeros en importarlo a occidente fueron los ingleses, que lo trajeron a mediados del siglo XVII desde Malasia, debido a que la popularidad del Ketsiap había traspasado las fronteras de China. Al principio no se vendía como un alimento, sino que al igual que la Coca Cola comenzó a distribuirse como medicina. Es en estos momentos cuando cambia su nombre, ya que los periódicos y la gente lo denominaban “Catchup”, de donde ha derivado hasta la actualidad.

3. El tomate y la popularidad del Kétchup

No fue hasta el año 1876 que el Kétchup se comercializó como la salsa que conocemos hoy en día y alcanzó una popularidad sin precedentes. ¿Quién tuvo la genial idea de añadirle tomate? Pues todo se debe a alguien llamado Henry J. Heinz, apellido que posiblemente te suene de algo. Hasta entonces, el señor Heinz trabajaba vendiendo conservas de rábanos en botes de cristal, algo que era muy novedoso y sofisticado para su tiempo.

La primera empresa en vender Ketchup fue Heinz & Noble, ya que al principio Henry tuvo un socio inversor. Con el paso de los años comenzó a extenderse hasta convertirse en un gigante a nivel mundial y en 1990 volvió a revolucionar el mercado con la aparición de los envases de plástico reciclable. Hoy en día el kétchup es conocido en todo el mundo y en Estados Unidos es consumido por un 97% de la población.

4. El Kétchup es un fluido no newtoniano

El Kétchup, junto a las cremas batidas, el esmalte de uñas o la sangre, entra dentro del grupo de fluidos no newtonianos. ¿Qué quiere decir esto? Pues que se trata de líquidos que son capaces de cambiar su estado de viscosidad al agitarlos. Por este motivo, antes de echarlo en el plato debemos sacudir el envase.

5. El kétchup es beneficioso para el organismo

El kétchup puede ser muy beneficioso si limitamos la frecuencia y cantidad de su consumo. En este sentido, posee vitaminas A, C y K procedentes del tomate, así como antioxidantes que ayudan a combatir la osteoporosis y las enfermedades cardiovasculares. No obstante, durante su proceso se añaden unos 3 gramos de sal y 7 de azúcar por cada 100 gramos, por lo que tenemos que tomarlo con moderación y nunca para sustituir los tomates naturales.